A quién recurrir para un proyecto web ha variado drásticamente, década a década.
En los años 90, si querÃas tener página web, lo primero que se te ocurrÃa era contratar a un ingeniero. Ellos saben de sistemas, y como Internet tiene que ver con computadoras y sistemas lo más obvio era buscarlos.
En los años 2000, aceptamos el error de los 90 y concluimos que lo que realmente necesitamos para un proyecto web es un diseñador. Y como era imperativo que nuestra web luzca asombroso, rendirse ante un diseñador era la solución.
¡Craso error, ya por segunda vez!
Al llegar al 2010 nos pusimos filósofos y antes de seguir persiguiendo cosas bonitas para la web quisimos definir qué es Internet. El debate cambió el mundo y la forma de pensar de sus habitantes. ¿Conclusión? ¡Internet es medio de comunicación!
¿Y ahora quién podrá ayudarnos?
Ya nos pusimos filósofos; ahora pongámonos lógicos. Si tienes un medio de comunicación, ¿a quién necesitas? ¡Obvio! ¡A un comunicador!
Ahora vienen los problemas. En el 2010 y nadie podÃa decir soy licenciado en Ciencias de la comunicación con especialidad en Internet. Los expertos que encontrabas lo eran por curiosos, los especialistas que hallabas lo eran por autodidactas.
Estamos en el 2021, y es la vorágine de las redes sociales. Se cree que estar en Internet es estar presente en las redes sociales. El dÃa que descubran que las redes sociales sirven para llevar tráfico hacia tu propio sitio web, muchos serán hallados con una bonita web, en el mejor de los casos, pero con contenido del antaño o vencido. En el peor de los casos, con abundantes links rotos o todavÃa en construcción, y otras cosas sin sentido.
Si quiere estar preparado, primero sé consciente que incursionarás en los medios, y segundo: Levanta un plan de mediano y largo plazo. Y para ello necesitas a alguien que sepa un poco de ingenierÃa, algo de diseño, y mucho de comunicación.